En Caracas, desde tiempos de la colonia, los feligreses católicos han observado la costumbre de visitar 7 templos en Semana Santa, justo antes de los días de pasión y muerte de Jesucristo.
En aquellos días, los fieles recorrían a pie el Centro de la ciudad, preferiblemente la noche del jueves santo, para protegerse del sol y de las altas temperaturas. Aún es impresionante ver cómo las calles del casco de Caracas se llenan de feligreses que cumplen con esa tradición que incluso aparece en el libro Recuerdos de Venezuela, escrito a finales del siglo XIX por la francesa Jenny de Tallenay.
En esta nota, les sugerimos un recorrido en orden por 7 templos coloniales para revivir esa costumbre que nos legaron los primeros caraqueños. También apuntamos algunas cosas interesantes que encontrarán en cada iglesia y, al final, les damos recomendaciones para hacer el paseo religioso sin complicaciones.
Hay que recordar que la visita a los 7 templos tiene como fin agradecer a Jesucristo por el don de la eucaristía y del sacerdocio que instituyó en una noche santa, en la que también instituyó la eucaristía; acompañarle en la soledad y sufrimientos en el huerto de Getsemaní; recordar las afrentas que recibió en las casas de Anás, Caifás, Herodes, Pilato,¡ y en el Calvario y estar a su lado en el silencio del sepulcro.
Los 7 templos
1. Nuestra Señora de La Candelaria
Sugerimos iniciar el recorrido de los 7 templos por este hermoso santuario, construido en lo que eran las afueras de Caracas por migrantes de las Islas Canarias. Albergaba las celebraciones de aquellos que no formaban parte de los blancos peninsulares o criollos y estaba dedicado a la advocación mariana que le da su nombre.
Ubicado frente a la plaza, el templo ha sido cuidadosamente restaurado y los trabajos permiten disfrutar del hermoso altar barroco y los fragmentos de pinturas murales que se han preservado desde la construcción del tempo.
Aquí reposan los restos del beato José Gregorio Hernández.
Dirección. Av. Urdaneta. Plaza La Candelaria. A 2 cuadras del metro de Parque Carabobo y con estacionamiento en las cercanías, por lo que se recomienda dejar el automóvil allí y efectuar el recorrido a pie.
2. Sagrado Corazón de Jesús
Encomendada desde su construcción a los padres dominicos, la iglesia está a pocas cuadras hacia el oeste (caminando por la avenida Universidad) del santuario de Nuestra Señora de La Candelaria.
El templo fue construido en estilo neogótico y guarda hermosos vitrales dedicados, en su mayoría, a santos de la orden que regenta esta iglesia.
A mediados del siglo XX fue demolida su fachada y eliminados parte de los primeros cuerpos para dar paso a la avenida Fuerzas Armadas.
Dirección. Avenida Fuerzas Armadas con avenida Universidad. Esquina Corazón de Jesús.
3. Basílica de Santa Teresa
Construida sobre los restos de la inacabada Iglesia de San Felipe Neri alberga la imagen del Nazareno de San Pablo, muy popular por la historia del milagro del limonero del Señor.
Reza la leyenda que, en sueños, el Nazareno reclamó a Guzmán Blanco que había derribado su casa, de allí que sea una basílica doble dedicada a Santa Ana y Santa Teresa, nombres de la esposa del entonces presidente.
Imprescindible apreciar en la fachada norte los trabajos de sillería del templo original que fueron aprovechados para la construcción de la nueva iglesia.
Dirección. Avenida Oeste 8. Esquinas de La Palma y Santa Teresa,
4. Iglesia de San Francisco
Construido por la orden de los franciscanos en el solar anexo al convento fue, por años, el templo más hermoso de la Caracas colonial. Y, debido a la ruina de la catedral metropolitana, a raíz del terremoto de 1812, fue allí que se confirió a Simón Bolívar el título de Libertador.
A pesar de las reformas emprendidas por Guzmán Blanco para armonizar la fachada con la del Palacio de las Academias y el aspecto parisino del centro de la ciudad, pudo mantener su aire señorial.
Entre otras imágenes del arte colonial alberga la de Nuestra Señora de la Soledad, patrona de Caracas y que acostumbraba salir en procesión la noche del Viernes Santo para encontrarse con la del Santo Sepulcro y regresar juntos, antes de medianoche, al templo de los franciscanos.
Dirección. Entre las esquinas de San Francisco y La Bolsa, avenida Universidad.
5. Basílica menor de Santa Capilla
Construida por Guzmán Blanco en su obsesión de hacer de Caracas un pequeño París, intenta reproducir la Sainte-Chapelle de la capital de Francia, en el solar que ocupó desde la fundación de la ciudad la ermita dedicada primero a san Sebastián y luego a san Mauricio.
A pesar de que el crecimiento urbano la ha ido rodeando ,sigue mostrando hermosas líneas que se elevan con ligereza. En su fachada principal es posible observar la escultura de san Miguel Arcángel venciendo a Lucifer.
Entre otras obras de arte invaluables alberga la Multiplicación de los panes, óleo de Arturo Michelena y la forma en que los arquitectos aprovechan la luz solar para reproducir las luces y sombras del cielo en el altar mayor merece unos minutos de contemplación.
Dirección. Esquina de Santa Capilla. Avenida Urdaneta.
6. Iglesia de Nuestra Señora de Altagracia
A esta iglesia asistían los pardos en la época de la colonia. Tiene el campanario más bajo del cuadrilátero histórico de Caracas, debido a los reclamos de las monjas del vecino convento de Carmelitas, quienes señalaban que desde un campanario tan alto los curiosos podían mirar hacia el interior del claustro distrayendo y rompiendo la clausura de las religiosas.
Construida por la cofradía de mulatos Los Hermanos de Nuestra Señora de Altagracia, fundada en 1614, el altar mayor es una obra de arte neoclásico que merece ser admirado a pesar de las malas condiciones en que se encuentra el templo.
Dirección. Avenida Oeste 3 con Avenida Norte 4
7. Catedral Metropolitana de Caracas
Es la sede del arzobispado de Caracas y data de 1577. Su historia está íntimamente relacionada con la de la ciudad pues, en sus puertas, se dio inicio a la revuelta popular del 19 de abril de 1810 y la leyenda quiere ubicar también allí el episodio de las Bejarano, quienes compraron su derecho de portarse como blancas sin serlo, todo con lo que recabaron vendiendo su famosa torta.
Por muchos años, la catedral fue la construcción más alta de la ciudad, aun después de haber sufrido graves daños en la torre durante el terremoto de 1812.
En la capilla de san Pedro se conserva una imagen de la Inmaculada, la cual perteneció al Convento de las Monjas Concepciones, suprimido por decreto de Guzmán Blanco.
Es imprescindible dedicar un rato a apreciar el cuadro inconcluso de Arturo Michelena que representa La Última Cena en la Capilla Nuestra Señora del Pilar.
Dirección. Esquina La Torre, Plaza Bolívar.
Recomendaciones para visitar los 7 templos
Es más seguro hacer este recorrido de los 7 templos en horas de la mañana del día Viernes Santo. Como la afluencia de público en esos días es muy elevada, lo mejor es comenzar temprano.
Tomar la previsión de que es mejor estacionar el vehículo en un punto cercano y hacer el recorrido caminando.
Usar protector solar y gorra –que se debe quitar al entrar a los templos-. El paraguas nunca esta de más porque en esos días la lluvia puede sorprender al caminante.
Llevar hidratación, aunque los locales de la zona siempre están abiertos y es posible adquirir algo para refrescarse en el recorrido.
Tener paciencia porque algunos de los 7 templos tendrán largas colas para el ingreso, especialmente la Basílica de Santa Teresa. Por eso, mientras más temprano empiece el recorrido, mejor.
Emprender el recorrido con espíritu abierto para disfrutar la experiencia y observar las costumbres y actitudes de los otros peregrinos. Es importante recordar que más allá de una visita turística es parte de una tradición religiosa que merece respeto por parte de todos.